
En la mayor parte de los países europeos la donación de sangre está vedada a los gay... ©Dominique Pipet.
El Comité Consultivo británico sobre la Seguridad de la Sangre, los Tejidos y los Órganos Donados (SaBTO) estima, en un informe en PDF publicado el pasado 8 de septiembre, que un período de abstinencia limitado a 1 año (en lugar de los 5 anteriores) no aumenta significativamente el porcentaje de contaminación potencial por VIH. La tasa de sangre contaminada con VIH se sitúa en una persona por cada 4,38 millones de donaciones tras cinco años de abstinencia, comparada con una muestra de cada 4,39 millones tras sólo un año sin relaciones homosexuales. El riesgo de contaminación sería, sin embargo, un 26,5% más alto si no se ha dado periodo de abstinencia previo, según el SaBTO. Hasta la fecha, el riesgo de contaminación por VIH era, en teoría, de una por cada 4,41 millones de donaciones.
La mayoría de Estados europeos prohíbe a los gays que donen, pese a la más que frecuente escasez de sangre en varios países. Éste es por ejemplo el caso de Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Irlanda, Noruega, Países Bajos, Portugal, Suecia y Suiza.
En cambio, en España se exige que los donantes de sangre –independientemente de su orientación sexual– hayan mantenido abstinencia (más allá de una persona) en los últimos doce meses, siendo el periodo de carencia de seis meses según Le Monde o de un año según el informe SaBTO (tabla 3). Italia impone asimismo una abstinencia a sus donantes de al menos cuatro meses si han tenido múltiples parejas, también al margen de su orientación sexual.