
Jill Burgess ha creado la aplicación Yess... para rentabilizar su matrimonio dando servicio a la comunidad. 😉 ©getyess.com
Yess significa yes-services. Dicho de otro modo, proveedores que dicen sí sin discriminar. La aplicación se descarga y se utiliza gratuitamente con el smartphone o tablette. El 8 de abril de 2019, tenía un listado de 80 profesionales dispuestos a trabajar con la comunidad LGBTQIA. Pero solo en Australia, donde acaba de lanzarse de manera oficial. Y, de momento, solo con una representación de la región de Central Coast, en Nueva Gales del Sur, donde vive y se ha casado Jill Burgess.
En concreto, la aplicación Yess ofrece profesionales dentro de 22 campos o categorías de actividad, desde pastelerías hasta alquileres de coches, desde floristas hasta joyeros, o desde hoteles hasta personas que celebran actos religiosos. Pueden buscarse profesionales friendly para todo tipo de evento, ya se trate de una boda o de un aniversario, de una cena en familia o de un viaje en crucero, de un consejo financiero o de la gestación mediante reproducción asistida.
Si bien la aplicación es totalmente gratuita para los particulares, factura a los profesionales cada vez que una persona se pone en contacto con ellos, ya sea para pedir información o para hacer una reserva. Pero con tres modalidades bien específicas:
- Los proveedores son facturados en función de su sector de actividad; por ejemplo, 3 dólares para cursos de baile o 10 dólares para servicios turísticos.
- Una facturación única por profesional y por cliente, sea cual sea el número de veces que el profesional trabaje después con la misma persona.
- No más de tres profesionales del mismo sector en cada zona urbana, lo que ofrece de forma automática una bonificación a las primeras inscripciones.
Para evitar pagar una comisión cada vez que alguien les pide información o presupuesto sin después contratar un servicio, los proveedores pueden indicar el máximo de información útil en su ficha; por ejemplo, horquillas de precios, gráficos, fotos, vídeos, etc. La inscripción, la ficha y el sonido contenido no son facturados; solo es facturable por tanto el primer contacto con una misma persona inscrita.

Joe es un artesano friendly que ha dicho Yess! ©getyess.com
Del lado de la clientela, la inscripción, la utilización de la aplicación Yess y el contacto con los profesionales son totalmente gratuitas. Sin embargo es necesario validar la inscripción para evitar los abusos y las bromas de mal gusto.
La fundadora de Yess confía en la dimensión viral de su aplicación, ayudándose de las redes sociales (en concreto Facebook e Instagram) y de los comentarios – integrados en la aplicación – de las personas que recurren a los proveedores.
Comentario. La aplicación Yess está aún en pañales, con solo 80 profesionales clasificados en toda Australia. En las FAQ tampoco menciona el número de particulares que han descargado la aplicación o quién la ha utilizado ya. Sería pronto para sacar conclusiones sobre el posible éxito de esta iniciativa.
La idea de una aplicación así nos gusta, y no solo para una tierra tan lejana como Australia. Equivale a crear, de forma interactiva, una lista blanca de proveedores de servicios, si no militantes, al menos friendly. Nos parece más productivo celebrar el trabajo de un profesional friendly que enfrentarse en los tribunales a un profesional abiertamente homófobo. Porque, en definitiva, la lucha por la igualdad de derechos se librará también en el terreno de la economía y del comercio.
Philca & carram / MensGo